7/17/2008

Mareo

Veo con escepticismo los rayos de sol que se cuelan por la ventana. Hoy no esperaba ver el sol, debo decir (Iván Torres me engañó!). Tampoco esperaba decir algo ni menos tener algo que decir. Pero sin saber bien como me siento a escribir, pienso que me está constando cada vez más, aunque no podría ser tan caradura de hablar de lo absurdo del bloqueo creativo, como una excusa para la falta de ganas y la ausencia de talento.
Es más bien una suma de todas las cosas, que al verme por delante de lo que antes perseguía, ahora me tira para atrás, como para que retome el lugar que me corresponde. Parece que mi psicóloga estaría contenta, porque ahora tendría otra pelada de cable más para contarle, ya que las anteriores duraron muy poco.
No es broma, ahora siento que llegando a tener lo que en algún momento deseaba, se me complicó aún más el panorama, en una desesperada forma de volver a la inseguridad y a la sensación de que las cosas pasan de largo por arriba mío y no las logro agarrar. Por suerte aún guardo algunos consejos, que no recuerdo si son propios o ajenos, que me dicen que me siente tranquilo, que igual todo se puede disfrutar. Que en estos momentos todo es mejor que antes. Que los desafíos están para pesarlos una y mil veces, y que quizás no vale la pena alcanzarlos, sino correrlos un poco más allá del camino imaginario. Algunos permanecen, y otros son simplemente los mismos, que van y vuelven.
Al final quedó claro, prefiero seguir desde atrás, o al menos desde el costado, porque adelante me marea...

2 comentarios:

yus dijo...

primero muerto, después amargo y ahora mareado... no será hora de un atento o un plácido?

los verdaderos desafíos están en las cosas q se esconden detrás de lo q creemos q son nuestros desafíos.

calma, q todo termina siendo una historia más para contar.

Mariano Rosenzvaig H. dijo...

Igual, mareado no está mal... cuando era chico jugaba a marearme y tirarme a la piscina, estaba muy bueno.
A la larga, no importa si estos estados son pasajeros, a mi me basta sólo con poder verlos.